Netflix, impulsado por el inesperado éxito de su incursión en el boxeo con el evento Jake Paul vs. Mike Tyson, planea una agresiva expansión en el mundo del pugilismo, apuntando a las super peleas más codiciadas del momento.
Tras obtener los derechos de transmisión de la trilogía entre Katie Taylor y Amanda Serrano, Netflix ha puesto su mira en dos combates que podrían marcar un antes y un después en la industria: Anthony Joshua vs. Tyson Fury y Canelo Álvarez vs. Terence Crawford.
Según Sports Illustrated, Netflix está interesado en adquirir los derechos de estas peleas para su plataforma de streaming. Si bien Canelo y Crawford ya habrían firmado un acuerdo para enfrentarse en septiembre, siempre y cuando Canelo derrote a William Scull el 3 de mayo, el futuro de un posible Fury vs. Joshua es incierto.
El evento Jake Paul vs. Mike Tyson, a pesar de las críticas sobre su calidad boxística, fue un rotundo éxito comercial para Netflix, atrayendo a 60 millones de hogares. El evento co-estelar, la pelea entre Katie Taylor y Amanda Serrano, también fue un éxito de audiencia, con 50 millones de hogares sintonizando la plataforma.
Además de la audiencia masiva, Paul vs. Tyson rompió récords de taquilla, recaudando más de 18 millones de dólares, superando los 9 millones que Canelo Álvarez obtuvo por su pelea con Billy Joe Saunders en 2021 en el mismo recinto.
Con estos números en mano, Netflix busca consolidarse como un actor importante en el mundo del boxeo, atrayendo a las superestrellas y las peleas más lucrativas a su plataforma.