Juan Diego Ortíz cayó derrotado por decisión dividida, en un combate donde tuvo que enfrentar al cubano Ernesbadi Begue y que tuvo tarjetas bastante dudosas y controversiales.
Begue culminó con la victoria por la vía de la decisión dividida, con jueces que anotaron 96-94 y 94-93 a su favor, mientras que un tercero vio la pelea 95-92 en favor de Ortíz.
La pelea fue una guerra desde el mismo primer episodio del combate, ambos peleadores visitaron la lona, pero la diferencia se notó claramente en la contundencia ofensiva por parte de Juan Diego Ortíz, quien en todo momento estuvo mucho más activo, y nunca rehuyó el combate, siempre estuvo buscando la pelea y puso en malas condiciones e incomodó a Begue en más de una oportunidad.
Sin embargo, a los ojos de los jueces esto no fue suficiente ya que el boxeador antillano consiguió terminar el duelo con el brazo en alto y ganó la corona latina de peso súper mediano de la Organización Mundial de Boxeo (OMB / WBO).