Los recuerdos, experiencias o vivencias, siempre merecen tener un espacio para ser contadas, más cuando suceden en medio de un trabajo periódico como el de un cubrimiento a un evento deportivo en otro país, donde las historias se cuentan por montón y se guardan en el baúl de los recuerdos para en alguna oportunidad ser llevadas al presente nuevamente.
En Boxeo de Colombia nos tomamos este espacio en medio del parate mundial en el boxeo producto del coronavirus (COVID-19) para rememorar lo que fueron esas dos contiendas de Edison Miranda ante el alemán Arthur Abraham, los cuales dejaron momentos para destacar, momentos para recordar.
Y en este recorrido comenzamos con el primer cara a cara entre ambos peleadores supermedio. Ese 23 de septiembre de 2006, Miranda viajó a Alemania, más exactamente a la ciudad de Wezlar, para buscar el título de la FIB, y tras él fue Boxeo de Colombia para el cubrimiento exclusivo en vivo y en directo, no a control remoto.
Miranda llegó a ese duelo con un invicto de 26-0, habiendo logrado 19 victorias de esas fueras de casa, haciendo que el presentarse como visitante no fuera algo nuevo para él. La antesala al duelo fue normal, pero ya en el ring las cosas cambiaron por completo.
Abraham apeló en gran parte de la reyerta al juego sucio, a movimientos poco leales en el boxeo que muchos peleadores usan para sacar de línea a sus rivales, cosa que terminó logrando con Edison, quien dominaba la contienda, a tal punto de haberle roto la quijada al alemán de un certero golpe, pero en un momento de descontrol ante lo que le hacía el contrario, soltó un cabezazo que obligó a la intervención del juez de la reyerta.
«Yo estaba sobrado en la pelea, pero sus trampas me llevaron a intentar darle un cabezazo. Él se quejó y el juez se agarró de eso para comenzar a favorecerlo. La pelea estuvo a poco de terminarse porque Abraham no quería continuar, pero de hacerlo perdía por TKO, lo que le hizo cambiar de parecer y salir a pelear, pero ya con el apoyo del juez que me quitó cinco puntos. Lo ayudó mucho. Yo gané esa pelea limpiamente», afirmó Miranda en conversación con Boxeo de Colombia.
Nunca antes visto que a un peleador le quitaran cinco puntos en un combate profesional, menos en uno por título mundial. La desazón era evidente en todos, por como la pelea se había dado, pero no podía hacerse más, y Mirada de iba con su primera derrota como profesional, aunque con la espinita para una revancha, la cual tendría lugar dos años después.
Cinco combates tuvieron lugar antes del reencuentro. Edison había crecido como profesional y estaba presto para lograr la victoria en los Estados Unidos, sede para esta pelea.
A diferencia de la primera en Alemania, la previa no fue del todo tranquila. A Miranda le llenaron de pruebas antidopaje constantemente, algo que, según el mismo peleador, era para sacarlo de concentración y ponerlo nervioso, cosa que no fueron capaces de lograr. Eso pasó en lo personal para Edison, ya que para Boxeo de Colombia pasaron dos cosas muy llamativas.
La primera se dio durante una de las jornadas de entrenamiento abierto al público. Un colega periodista, en medio de una sesión de fotos a los peleadores, comentó que en el escenario había una colombiana que se iba a presentar en la velada. En ese momento la cámara de BDC salió a tomarle la cantidad de fotos necesarias a la compatriota y luego a tener una plática con ella. Cuando se bajó del ring, en el intento de entablar una conversación, la chica de tes morena respondió que no sabía hablar español y se marchó. El malestar por el «engaño» provocó que las fotos tomadas se borraran al «no servir para nada» al no ser colombiana la protagonista de ellas. Pero luego ese momento se convertía en uno de arrepentimiento total, cuando al realizarse algunas indagaciones, se conoció que esa mujer era nada más y nada menos que Cecilia Braekhus, una joven ‘Primera Dama’ que hacía su debut profesional en los Estados Unidos, y Boxeo de Colombia, gracias a un mal entendido, perdió la posibilidad de tener la exclusiva de ese momento histórico de la actual campeona absoluta de los peso wélter.
La segunda, menos dolorosa, se dio con un periodista alemán, quien nos reconoció por el nombre de Boxeo de Colombia y nos retó: «su colombiano no aguantará cuatro asaltos». Una frase llena de soberbia que prendió las emociones de cara a la pelea del 21 de junio.
Llegada la noche, la cámara de BDC estuvo al borde del ring y detalló cada uno de los asaltos de los asaltos de la contienda, que por desgracia para Mirada, también fue una derrota, esta vez fuera de toda controversia en su desarrollo, ya que Abraham ganó con un claro TKO en el cuarto round. Sin discusiones.
Pero lo reprochable de aquella velada fue la criminal respuesta del hermano de Arthur, quien se subió al ring y atacó con dos patadas a un Edison que yacía en el suelo noqueado. El bochornoso incidente pasó frente al foco de BDC, que tomó las fotos al instante, como también llamó con urgencia a seguridad para que se llevaran detenido al atacante.
Una noche de locos. Mirada la recuerda muy bien. Nos explicó que había un problema entre ambos desde hace tiempo atrás, pero nada para justificar esa acción cobarde, una de las más intensas vividas en una velada de un colombiano en BDC.
Definitivamente un momento para rememorar junto a uno de los mejores pugilistas de nuestro país, con quien compartimos mano a mano ambas peleas, algo que agradece luego de más de diez años y celebra el que hayamos decidido recordar esas dos noches, que hacen parte de las muchas anécdotas de Boxeo de Colombia.
Por: Redacción BDC