El próximo 26 de septiembre en el Mohegan Sun Casino de Uncasville, el dominicano Jeison ‘Banana’ Rosario tendrá la primera defensa de sus títulos superwélter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) y Federación Internacional de Boxeo (FIB), enfrentándose a Jermell Charlo, campeón del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), en lo que será noche de unificación de las 154 libras.
“Estamos en perfectas condiciones, preparándonos”, expresó Rosario a Boxeo de Colombia tras finalizar su jornada de entrenamiento, asegurando que esta defensa de campeonatos “es un compromiso, no solamente con los títulos sino con Latinoamérica entera”. “Tengo un compromiso con los latinos de representarlos y dar lo mejor de mí para que la fanaticada del boxeo vea que hay latinos que pueden hacer historia”, dijo.
Tras su victoria contra Julián Williams en enero, venciendo por nocaut en el quinto asalto, muchos comentarios surgieron, mostrando sorpresa por la victoria del dominicano y de los cuales aseguraban que el triunfo se trató de un golpe de suerte. A estos, Rosario les dice que esta pelea define quién es él.
“La gente cree que fue suerte. Luego de esta pelea la gente va a ver que no es suerte, que es bendición de Dios y el trabajo de nosotros resalta. Yo salgo a hacer lo que sé hacer, que es pelear. Voy a hacer lo mío, tratar de ganar y buscar la forma de ganar, sea como sea”, sostuvo.
Por otra parte, ratificó que se prepara para durar los 12 asaltos de la contienda, “tirando desde que empieza hasta que termine”. No se animó a dar un pronóstico, pero aseguró que “si Charlo se encuentra con una mano mía, en el primero como en el 12, no va a quedar de pie”.
“No soy un peleador que voy a intercambiar palabras o discutiendo. Debajo del ring le doy el respeto a las personas. El 26 de septiembre va a haber tiempo para arreglar cualquier problema. (…) Voy a ser un referente. El soñarlo me va a hacer perder el tiempo, ya es algo que está ahí, debo ir y tomarlo. El cinturón va a ser mío”, agregó.
Finalmente, el dominicano habló sobre las pruebas de COVID-19, pues constantemente tiene que someterse a estas para seguir firme con la pelea, y mostró su nerviosismo al momento de realizarla.
“Yo no sé qué pasa (con las pruebas), aguanto golpes. Es algo bien difícil. Las cosas se están poniendo cada vez más difíciles. En la última pelea mía hice sacrificios y ahora debo hacer más, como la prueba de COVID-19. Le tengo miedo a las agujas. Es algo bien estresante, pero hay que hacerlo porque es lo que acredita para poder pelear con Charlo. Es más importante la pelea que cualquier sufrimiento”, sentenció.
Por: Redacción BDC Internacional.