La gallardía de Carl Frampton fue premiada. ‘The Jackal’ permanente buscó a Scott Quigg, lo que convenció a los jueces de darle una decisión dividida (115-113; 113.115; 116-112) a su favor en el pleito que se desarrolló la noche del sábado en Manchester Arena. De esta manera Frampton no sólo mantuvo su invicto y le quitó el de su rival, sino que también que se convirtió en el campeón unificado de los supergallos con las fajas de la FIB, que retuvo, y Super Mundial de la AMB que le quitó a Quigg.
Dos primeros rounds de auténtico estudio. Ninguno de los dos boxeares parecía tener apuro por buscar a su contrario. Frampton medía con un tibio jab de izquierda, mientras Quigg observaba el ataque y contragolpeaba con golpes sin mayor importancia.
A partir del tercero Frampton comenzó a tomar la iniciativa, lanzando un poco más, pero una sólida defensa de su oponente impedía causar un daño considerable. Por su parte Quigg, muy rara vez soltaba las manos, pero cuando lo hacía dejaba la sensación que podía causar daño.
Sólo hasta el séptimo la pelea comenzó a mostrar facetas interesantes. Quigg decidió salir a atacar, conectando manos que ponían contra las cuerdas a Frampton, y éste a su vez, encontraba espacios también para golpear.
En los últimos asaltos Quigg por fin decidió caminar hacia adelante y puso en problemas a un aguerrido Frampton, propinando buenos cruzados con ambas manos. Los intercambios finalmente aparecieron en el ensogado, siendo Quigg el que se lleva las acciones.
Sin embargo, la decisión final favoreció a Frampton. El fallo de los jueces puede ser discutido si se quiere, tal como lo hizo la esquina perdedora, pero lo indudable es que si Quigg hubiera sido valiente desde el inicio, se hubiera llevado la pelea por un amplio margen.
Por: Redacción BDC Internacional – Foto: Showtime
