Corría el mes de noviembre del año 1977, cuando el boxeador Muhammad Ali visitó nuestro país. Ali estuvo en la ciudad de Bogotá durante tres días –desde el sábado 12 hasta el lunes 14– de dicho mes para hacer presencia en una obra benéfica en pro del Hospital Franklin Delano Roosvelt, aunque también participó de otras actividades.
El mítico peleador fue recibido como una estrella en la capital de la República, a donde llegó junto a todo su equipo de seguridad y su familia.
A su arribo a Bogotá, estaba prevista una rueda de prensa en una sala del aeropuerto El Dorado, sin embargo, la multitud de periodistas presentes –más de mil– impidieron su realización. El boxeador estuvo alojado junto a todo su grupo de acompañantes en el Hotel Hilton.
Durante el domingo 13, Muhammad Ali estuvo presente en el duelo que sostuvieron Millonarios y Nacional en el estadio Nemesio Camacho ‘El Campín’, donde estuvo encargado del saque de honor.
El día lunes, Ali se entrevistó con el presidente de la República, Alfonso López Michelsen. Un diario capitalino expresó, a manera de anécdota, que el jefe de Estado no quería recibir al campeón mundial, pero fue persuadido de su intención, al informarle que era un personaje importante.
Ese mismo día, ‘El más grande del boxeo’ sostuvo un encuentro con comunidades afrodescendientes asentadas en la ciudad y participó de una pelea de exhibición ante el colombiano Bernardo Mercado, prospecto que no tuvo un gran futuro sobre el ensogado.
El enfrentamiento de muestra se realizó en la Plaza de Toros Santa María, donde por lo menos 12.000 personas se dieron cita para observar a Muhammad Ali en acción. Otro medio bogotano calificó la reyerta como “algo alegre, distinto, en medio de un entusiasmo que muy pocas veces se había visto en la plaza de toros”.
Con los recursos obtenidos en este pleito, la junta del Hospital Franklin Delano Roosvelt pudo solventar la crisis económica que sostenían y que amenazaba con el cierre de este importante centro asistencial. Cabe destacar que la visita de Ali a Colombia fue conseguida por una invitación expresa del periodista Gustavo Castro Caycedo y que fue posible gracias a los aportes de la empresa privada y pública.
Pero sin duda, lo que más recuerdan los colombianos de su estancia en el país, fue la frase expresada al llegar a nuestro territorio, en la cual recoge toda su grandeza.
“Me invitaron para una obra de beneficencia y, además, sé que aquí me consideran héroe. No están equivocados. Yo soy un héroe”, dijo en aquel momento.
También trascendió que el boxeador tenía una invitación para visitar Cartagena, pero no fue posible debido a que Ali no se acostumbraba a la altura en Bogotá.
Ali falleció un día como hoy hace 8 años, un 3 de junio de 2016.