El año turbulento de Ryan García continúa su espiral descendente con una nueva demanda. Fanmio, la plataforma que iba a transmitir un combate de exhibición entre García y Rukiya Anpo, ha demandado al boxeador y a Golden Boy Promotions por incumplimiento de contrato, fraude e interferencia ilícita.
La demanda surge tras la cancelación de la pelea entre García y Anpo, programada para diciembre pasado. García, quien se encontraba cumpliendo una suspensión de un año impuesta por la Comisión Atlética del Estado de Nueva York (NYSAC) tras dar positivo por ostarina, habría violado los términos de su suspensión al participar en dicho combate.
Según Fanmio, García tenía un acuerdo exclusivo para pelear contra Anpo y recibió el pago correspondiente, pero finalmente incumplió el contrato. Además, la plataforma acusa a Golden Boy Promotions de sabotear activamente el evento.
«FANMIO confiaba en que este evento sería un gran éxito, y sus acciones reflejaron su confianza en el tiempo y el dinero invertidos en la promoción. A pesar de la exclusividad de Ryan para el evento, está programado para pelear el 2 de mayo en Times Square, incumpliendo sus obligaciones contractuales», declaró la compañía a Worldboxingnews.com.
La demanda llega poco después de que García lograra una victoria en su demanda contra Devin Haney. Sin embargo, esta nueva batalla legal representa otro desafío para Golden Boy Promotions y su intento de limpiar la imagen de su estrella.
El incidente se suma a una serie de eventos desafortunados que han marcado la carrera de García en los últimos meses, incluyendo su resultado adverso en una prueba antidopaje y sus controvertidas acciones previas al combate contra Haney, como beber cerveza en el pesaje y no dar el peso.