Ramiro Cañas Guerra
Rubén ‘La Cobra’ Valdez fue, de los boxeadores del periodista, compositor, cantante y representante de boxeadores José ‘Pepe’ Molina, quien más cerca estuvo de cumplirle el sueño “…“siempre quiso tener un campeón, nosotros peleamos el título con coraje”.
El 2 de marzo de 1980 peleó por el título supergallo CMB ante Wilfredo Gómez en el Caesars Palace de Las Vegas. Perdió por nocaut técnico en el sexto asalto, pero ganó un papá que no tuvo de niño.
“Él era un padre para mí, significó mucho. Agradezco a Dios habérmelo encontrado en la vida. Era un hombre amable, que todo lo daba, sincero. No conocí a mi padre, pero Dios me lo presentó a ‘Pepe’ ”, dijo nostálgico
Sobre el féretro de Pepe aseguró “ es una promesa que le tengo: sacar un club de boxeo que llevará su nombre, José Molina y más adelante tener campeones mundiales”.
Valdez se retiró del boxeo en 1982, a los 28 años, con un registro de 46 victorias, 10 derrotas, 4 nocauts y un empate.
Tanto respeto y aprecio le tenía a Pepe, que le pidió permiso para entrar a la Policía, “él no quería, no le gustaba. Lo convencí, me dio el sí y me metí a la Policía”.
Hoy es pensionados de institución, pero ninguno de los golpes que recibió en sus 57 peleas como profesional le ha dolido tanto.
Es un ejemplo de una relación promotor y boxeador, distante a la de muchos hoy en día que se trenzan en conflictos mediáticos con el deportista.
“Ya eso no se ve, eso se acabó. Relaciones como la de Rodrigo Valdez Melanio Porto; ‘Pepe’ y yo. No hay relaciones así de sinceras y con esa fraternas».
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