Sunny Edwards no puede esperar a que llegue la hora de defender su cetro mosca de la Federación Internacional de Boxeo. El pegador inglés se medirá a Félix Alvarado, un peligroso rival que no ha perdido desde 2014 y que quiere conquistar un nuevo título en una diferente categoría, y sabe que vencerlo le permitirá consolidarse en una eventual lucha por la unificación de las 112 libras.
«Disfruto el desafío», manifestó Edwards (18-0, 4 KO), destacando que Alvarado dio un paso adelante al subir de categoría para enfrentarlo en el ring: «no solo fue campeón mundial hace unas peleas, sino que ascendió con la intención de pelear conmigo. Eso es bueno porque en todas las demás etapas de mi carrera, me han evitado».
Acerca de esta situación, el pegador inglés argumentó que varios rivales de la categoría e inclusive un campeón como Artem Dalakian lo evitaron en su momento: «solo este año, Dalakian no quería pelear conmigo en la cartelera de Usyk-AJ; David Martínez no quería pelear conmigo en México y Ricardo Sandoval, que había sido el siguiente como mi obligatorio, se retiró de la posición el día antes de que se llamara el obligatorio y parece que preferiría enfrentar a dos hombres por un título mundial, Jiménez y Dalakian, en lugar de solo pelear conmigo».
Es por ello por lo que el campeón de la FIB reconoce la valentía de Alvarado (38-2, 33 KO) de subir de peso y enfrentarlo en el cuadrilátero para optar por su título: «Felicito a Alvarado, es el primer peleador que realmente corre hacia una pelea conmigo. Llegó de peso buscándome, respeto eso. No creo que me vaya a mostrar nada que no haya visto antes, pero es un peleador peligroso, es un retador legítimo, un ex campeón mundial legítimo y ridículamente pesado para el peso».
Finalmente, Sunny Edwards dejó en claro que él lo que busca es peleas que verdaderamente le exijan y así construir su legado: «quiero la competencia, no quiero peleas fáciles, así que es bueno enfrentar a alguien de su calibre».
