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Eleider Álvarez: un sueño de campeón que arde en la nieve de Quebec

Los cinco grados bajo cero en los que muchas veces el boxeador colombiano Eleíder Álvarez le toca caminar desde su vecindario en Quebec (Canadá) hasta el gimnasio para entrenar, está aún muy lejos de ser una prueba de hierro para su voluntad si se le compara con lo que tuvo que hacer para poder entrar a este país.

Debió enfrentar tres negativas de visa del gobierno canadiense, tener que viajar en bus desde Apartadó (Antioquia) hasta Caracas (Venezuela), tener que enfrentar sospechas de narcotráfico y dejar a toda su familia para poder emprender el sueño que lo cautivó desde pequeño, ser campeón mundial de boxeo.

Por eso las gélidas calles quebequianas no pueden apagar el fuego que sigue consumiendo su corazón. Álvarez enfrentará el sábado 28 de noviembre la prueba deportiva más dura hasta el momento en carrera de boxeo de paga. El semipesado de Malawi Isaac Chilemba, aspirante por tercera vez al cinturón que tiene el colombiano, el de plata de los semipesados del Consejo Mundial de Boxeo, probará las condiciones de este pegador que ocupa a buena parte de la prensa especializada de Quebec que cubre sus peleas y bajo el amparo de un importante manejador de esta zona canadiense, Yvon Michel. Las dos veces anteriores Chilemba las perdió por decisión unánime. El púgil rival viene de un país al sur del continente africano entre Zambia y Mozambique.

El ganador de este combate eliminatorio quedará en camino derecho a enfrentar al monarca desde hace dos años de la categoría de los semipesados, el Haitiano  Adonis ‘Superman’ Stevenson, otro pegador amparado por el mismo manager de Álvarez.

“Nos tocó ir en bus desde Medellín hasta Caracas porque cuando nos negaron las visas (Óscar Rivas, otro boxeador colombiano que viajó con él) supimos que en Venezuela el trámite para hacerlo es más rápido que en Colombia. En nuestro país es de dos meses, mientras que en el vecino país es muy rápido. En cuestión de horas. Sin embargo, en el bus que viajábamos, durante una requisa al bus, en el baúl de éste encontraron un acordeón y dentro de éste iba un paquete de cocaína. Como dentro de todos los pasajeros íbamos tres colombianos, nos las querían montar a nosotros. Pero como quien no la debe, nada teme. Siempre dijimos que somos boxeadores y nuestro interés no es traficar con drogas. Así fue que pudimos llegar a Canadá”, cuenta Álvarez, de 31 años e invicto en 18 peleas con 10 nocauts.

El problema con inmigración radicó en que la primera vez que vinieron los pugilistas a Canadá, de eso hace ya seis años, se quedaron tres meses más del tiempo que estipuló su visado y por ello se hicieron merecedores de la sanción por parte del gobierno de este país norteamericano.

Su entrenador, el canadiense Marc Ramsay, estaba muy convencido cuando comenzó la operación de búsqueda de nuevos prospectos para la empresa que dirige el ex entrenador de boxeo Yvon Michel, que lleva el mismo nombre de este Yvon Michel Group, y vio los registros de Álvarez y Rivas. Estos fueron elegidos dentro de un selecto grupo de quince pegadores en todo el mundo para ser reclutados. Por ello en ningún momento desistieron cuando comenzaron las dificultades con la oficina de inmigración de Canadá cuando esta le negó la entrada en tres ocasiones.

“A veces es un poco complicado mi relación con ellos porque hay una línea que se confunde entre el entrenador y el amigo. Estos chicos (Álvarez y Rivas) son muy buenas personas y excelentes profesionales, pero hay veces que me toca ser rudo con ellos y recordarme a mí mismo que soy su entrenador. Haberlos traídos a los dos, siendo del mismo país, ayudó a la integración de ambos a esta nueva cultura y país”, dijo.

Gerardo Sosa, un mexicano radicado hace años en Quebec y administrador del gimnasio al que asisten los colombianos, contó que el primer reto que debieron afrontar tanto él como todos los latinos que llegan “es el clima. Lo duro de éste. Muchas cosas que nos toca aprender cuando llegamos acá”.

Redacción BDC/Foto: Marco Perez Zapata/Mpsportimages.com

 

 

 

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«Voy a quitarle ese título»: Rodolfo Puentes

Después de un largo viaje que comenzó el lunes en Barranquilla y terminó el Miércoles en East London, Rodolfo Puentes (16-1-2, 12 KOs) llegó al lugar de su próxima pelea, la cual será este sábado contra Simpiwe Vetyeka (27-3, 16 KOs), para intentar arrebatarle el cinturón Internacional de la AMB en la primera defensa de sudafricano.

El púgil barranquillero, quien viajó junto a Marvin García y el abogado Alberto Torres, realizó la mayor parte de su preparación en el gimnasio del estadio Metropolitano, bajo la supervisión de Luis ‘Chicanero’ Mendoza. Además, efectuó varias jornadas de trabajo en Cuadrilátero, pues “no se encontraban sparrings del peso”.

Sobre su rival no conoce mucho. “No me interesa si es bueno. Tengo claro que vengo a hacer acá y es ganar. Me siento muy bien preparado”, señaló el colombiano.

Puentes prometió “ganar antes del límite” el pleito, el cual está pactado a 10 asaltos en las 126 libras. “Voy a salir victorioso por toda Colombia. Voy a quitarle ese título”, sentenció.

Por: Jeffry Almarales Nieto / @JeffryAlmarales

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