Las más de 130 peleas que ha realizado Brandon Valdés en el boxeo amateur no sólo muestran el gran número de veces que ha saltado al cuadrilátero, sino que también revelan un duro camino, el cual lo ha motivado para salir al anillo.
Valdés es el más joven de los boxeadores que integran la concentración de la Selección Colombia, pero a sus 17 años ha vivido momentos que esconden su edad y lo llaman a ser una persona madura, como cuando conoció que su padre estaba preso por hurto.
“Fue el momento más difícil que tuve, apenas tenía 13 años, mi padre siempre estaba conmigo para todos lados y me llenaba de apoyo, me sentí muy solo y desanimado”, señaló el púgil a Boxeo de Colombia. atravesó esta situación durante 6 meses, hasta que su padre volvió a ver la luz de la libertad. Ahí parecía que todo había terminado, pero no fue así. Un año después su madre cayó tras las rejas por el mismo delito.
Brandon era consciente que “cuando uno quiere salir a adelante hace como sea”, por ello desahogaba toda su melancolía con las peras del gimnasio. “yo dije que iba a triunfar para prohibir que mi padre y mi madre estuvieran en la delincuencia”.
Las situaciones eran innumerables. En ocasiones pasaban días sin probar alimento. Pero el rival más duro con el que chocaba cada año y nunca encontró el estilo para derrumbarlo fueron los diciembres.
“Lo más triste era cuando llegaba diciembre, uno veía a los otros niños estrenando ropa y nosotros nos encerrábamos temprano y nos poníamos a llorar. Hubo un año en que yo tenía mis zapatos despegados y mi papá iba a salir a robar, pero le dije que no, que mejor me regalara una gota mágica y yo los pegaba”, aseguró Valdés mientras sus ojos emanaban un brillo natural.
Las duros golpes lo enviaron a la lona varias veces, pero siempre se levantó hasta que logró un contundente nocaut, evitar con sus consejos de niño que sus padres delinquieran. “Los voy a sacar adelante con el boxeo. Yo tengo que ser grande”.
Por: Jeffry Almarales Nieto / @JeffryAlmarales